Que bueno que dieron espacio para reflexiones como la que aquí se presenta, tiempos difíciles, emociones contenidas, nuevos aprendizajes... gracias por compartir. Realizar cuidado humanizado, primero cuidando de nosotra(o)s misma(o)s.
Esta situación atípica nos está haciendo ser conscientes de situaciones que, aunque no son nuevas, se están volviendo habituales. Las "no" despedidas, ser la única persona para "acompañar" a ese paciente que ya no puede luchar más, esa ceremonia de despedida que no ha podido ser... que antes eran atípicas, extraordinarias, se están volviendo demasiado frecuentes y ordinarias.
Lo bueno, la fortuna de esos pacientes es que está Blanca... muchas Blancas que lo acompañarán, aunque sea sólo un poquito y sin llorar, en esas circunstancias.